A la hora de hablar de problemas que afectan a los españoles, siempre solemos pensar en lo mismo. El Instituto Nacional de Estadística siempre dice que la situación económica es motivo de preocupación entre nuestros ciudadanos. Otro de los asuntos que suelen preocupar a la ciudadanía es la calidad de nuestra clase política, tan en duda durante estos últimos años por un asunto como lo es la corrupción. En última instancia, pero no por ello menos importante, preocupa la indefensión laboral de los trabajadores frente a los empleadores.
Pero hay un asunto que, aunque no aparezca entre los primeros problemas y preoupaciones de nuestros ciudadanos, está creciendo de una manera importante en los últimos años. Se trata de un problema como lo es la infertilidad, que afecta tanto a hombres como a mujeres y que se ha desarrollado en un país como el nuestro a causa del aumento de la contaminación, el creciente uso de los dispositivos tecnológicos, el estrés y los malos hábitos alimenticios. Desde luego, no cabe la menor duda de que es un asunto como para estar preocupados. No es para menos.
Los datos que nos ofrecen diferentes medios de comunicación corroboran lo que venimos comentando. Una noticia que fue publicada en el diario La Vanguardia en abril del 2013 indicaba que la tasa de infertilidad acababa de llegar al 17% de nuestra población y que iba a seguir creciendo de cara a los años que estaban por llegar. Y es que estamos sometidos a una gran cantidad de peligros en los tiempos que corren. Este comentario dista mucho de ser el tópico habitual y tiene como principal misión que todos y cada uno de nosotros adopte las medidas necesarias para protegerse y combatirlos.
Otra noticia, en este caso publicada en el portal web Let’s Family, hacía referencia a las cifras de la infertilidad en el interior de nuestras fronteras, asegurando que un problema de este calado afecta a una de cada seis parejas que vive dentro del país. Este es un problema de calado. ¿Cómo os sentiríais si quisierais tener hijos y no tuvieseis la posibilidad de hacerlo? Los problemas psicológicos que se relacionan con esto son realmente potentes y, desde luego, no pueden obviarse. Muchas personas necesitan ayuda y la cooperación y colaboración de diferentes actores de nuestra sociedad es la mejor manera que ésta tiene de brindársela.
Son muchas las personas que tienen algún problema de fertilidad en nuestro país y en otros muchos de nuestro entorno. Este tipo de problemas no son solo de corte físico, sino también de corte psicológico, como tantas veces han destacado los expertos en la materia. Se trata de un asunto para el cual se necesitan diferentes actores de nuestra sociedad. Se necesitan personas preparadas desde el punto de vista médico para tratar este tipo de problemas, personas que tengan estudios en psicología y también apoyo desde diferentes empresas. También, según los profesionales de Ivi Global Education, se necesita formación en la materia, un asunto en el que se encuentra especializada precisamente esta entidad y por lo que viene luchando desde hace años.
Un problema de presente… y de futuro
La formación es el único camino que nos queda para tratar de afrontar este tipo de problemas con las máximas garantías. Y es que los problemas relacionados con la fertilidad, tanto la masculina como la femenina, van a ser mucho más habituales en el futuro a causa de la existencia de mayores niveles de contaminación, la presencia cada vez más constante de aparatos electrónicos en nuestra vivienda y el sedentarismo imperante en la mayoría de personas que componen nuestra sociedad.
En este sentido, la formación es realmente importante. Solo a través de esta vía es posible que podamos encontrar la manera de reducir los problemas que padecen todas las personas que sufren de infertilidad. Y es que es totalmente cierto que este asunto genera una cantidad de pensamientos negativos que es perfectamente entendible que afecte a nuestra mente. Por otra parte, es importante que la colaboración y cooperación entre diferentes actores de la sociedad, como hemos comentado antes, sea algo efectivo y real. De lo contrario, muchas de nuestras esperanzas se desvanecerán.
Hay que tener en cuenta que este no es un problema cualquiera, que estamos hablando de que hay personas que no pueden tener hijos e hijas a causa de un problema corporal propio. Y que es necesario tratar a estar personas con tacto. Para eso es importante también un elemento como lo es la formación. De no existir esa formación, será mucho más difícil que la gente sepa cómo combatir este tipo de problemas, además de que encontrar una solución se verá como algo imposible.